Da Capo*

Inicio este weblog influído en parte por algunos de mis amigos que se han lanzado últimamente al circuito de la blogósfera y me invitan a seguirles, en parte por la curiosidad de probar algo nuevo, y en parte también por aprovechar la posibilidad de utilizarlo para ampliar el círculo de personas con las que pueda compartir gustos, aficiones e inquietudes.

La principal diferencia entre mis amigos y yo es que la mayoría de ellos, de una manera u otra, son profesionales del mundo de las letras, y yo no (aunque tenga hechos mis pinitos en este terreno). Escribir no es mi fuerte .

Todavía no tengo muy claro qué pretendo hacer con esta bitácora, ni hacia dónde conducirla, pero no quiero que sea un diario personal, ni tampoco una plataforma para la masturbación de mi ego.

Todos tenemos ego, es una parte importante de la personalidad y tiene su papel, pero cuando es demasiado grande en lugar de ayudar a conseguir nuestros objetivos vitales tiende a entorpecer el camino y estropear las cosas. Especialmente en nuestra relación con los demás. Cuanto más espacio ocupa el ego en la vida de una persona, menos espacio queda para (el ego de) los demás. Ha de haber sitio para todos.

Tengo algunas aficiones de adquisición reciente, el jazz, el blues y los bailes de swing, con las que estoy encantado y de las que puedo hablar y comentar cosas; también puedo añadir enlaces hacia sitios con información sobre estos temas, ayudar a correr la voz de algunos de los eventos que puedan interesar a otros aficionados, enlazar vídeos y cosas así.

También puedo colgar aquí algunos ensayos, cuentos y pensamientos que escribí hace tiempo y llevan una eternidad secándose en el cajón de las telarañas (esos pinitos de los que hablaba antes), ...pero pocos, sin abusar.

Espero que encontréis los artículos del Bar Edén útiles, interesantes, y si no al menos, entretenidos.

Buscad una mesa libre, sentaros cómodamente y pedidle algo al barman, que es un tipo enrollado y os atenderá con una gran sonrisa.

(*) Da Capo: Término del lenguaje musical, el solfeo, que significa "Desde el principio" en una partitura.